Cuando un adolescente declara que ya no tiene que seguir las reglas de sus padres causa la risa de éstos, es ignorado hasta que pasa el tiempo y tal afirmación es aceptada --en algunos casos, 11 años, como de 1810 a 1821. Claro, se pone rebelde porque ve que muchos de sus manguitos y vecinos lo están haciendo.
Cuando finalmente está fuera de casa se da cuenta que la cosa no es tan fácil, necesita trabajar y obtener dinero; comienza a pedir prestado a sus padres y vecinos --pregúntenle a España, Francia e Inglaterra.
Después de mendigar trabajo, rogar, tocar puertas, obtiene un empleo; se da cuenta que aún no es independiente, tiene un jefe autoritario, explotador a quien le pertenece todo el fruto de su trabajo --EU. Cuando era chico todos los adultos le decían "estudia para que no seas un Don Nadie", para no tener que mendigar dádivas de otros, sino exigirlas y ser autosuficientes. Pero nuestro joven proto independiente es más bien un huevón
No ha conquistado aún la independencia económica cuando se da cuenta que la del espíritu y la mente, intelectual y científica son primero; nuestro chavo que dejó la secundaria a medias a penas si puede ver el tamaño de las cosas. Hoy que está enfermo se da cuenta (tal vez no lo hace) que necesitaba estudiar, hacer las cosas por sí mismo, no esperar a que laboratorios canadienses y de su patrón le confirmen si está enfermo, no esperar a comprar medicamentos que otros hacen y naturalmente le venden muy caro. Ya está planeando su festejo a 200 años que se salió del corral, pero aún no es independiente de la cabeza, tiene aún el cordón umbilical del cerebro.
Cuando finalmente está fuera de casa se da cuenta que la cosa no es tan fácil, necesita trabajar y obtener dinero; comienza a pedir prestado a sus padres y vecinos --pregúntenle a España, Francia e Inglaterra.
Después de mendigar trabajo, rogar, tocar puertas, obtiene un empleo; se da cuenta que aún no es independiente, tiene un jefe autoritario, explotador a quien le pertenece todo el fruto de su trabajo --EU. Cuando era chico todos los adultos le decían "estudia para que no seas un Don Nadie", para no tener que mendigar dádivas de otros, sino exigirlas y ser autosuficientes. Pero nuestro joven proto independiente es más bien un huevón
No ha conquistado aún la independencia económica cuando se da cuenta que la del espíritu y la mente, intelectual y científica son primero; nuestro chavo que dejó la secundaria a medias a penas si puede ver el tamaño de las cosas. Hoy que está enfermo se da cuenta (tal vez no lo hace) que necesitaba estudiar, hacer las cosas por sí mismo, no esperar a que laboratorios canadienses y de su patrón le confirmen si está enfermo, no esperar a comprar medicamentos que otros hacen y naturalmente le venden muy caro. Ya está planeando su festejo a 200 años que se salió del corral, pero aún no es independiente de la cabeza, tiene aún el cordón umbilical del cerebro.
¡Feliz Bicentenario! (re contra-sic)
ResponderEliminar... y vendrá la fiesta, y, en medio del baile, el recién recuperado zoquete, en agradecimiento a su patrón -el mismo que puso la lana para el guateque-, cantará para él: "El himno al Vicente-nario", graciosa mezcla entre un fragmeto del himno nacional y un par de estrofas agregadas por un nefasto expresidente, para la inigualable ocasión.
ResponderEliminarSerá peor que la influenza, jajaja... saludos!
Tu entrada está genial.
ResponderEliminarEse pinche chamaquito huevón se encontro un líquido negro que su patrón y los amigos de su patrón no tenían y sabían como usar y creyo que de ello podría vivir, así que se tiro a la hamaca
Gracias por sus comentarios, gracias Vakero por hipervincular este post en tu bló. JIFF gracias por seguir este blog y, en efecto, me quede pensando en eso del petróleo, ja, tienes toda la razón.
ResponderEliminarSaludos.
XD q chistoso es un ser independiente que recien camina pero no tiene la madurez mental para saber a donde dirigir sus pasos..........Esperemos no se acabe México para cuando sepa que hacer............:(
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